Es en torno a una mesa donde las grandes ideas se convierten en proyectos. Es en torno a una mesa donde directivos y empleados, cargos institucionales y miembros de asociaciones, emprendedores y soñadores realizan sus negocios, discusiones y brainstorming. Es en torno a una mesa donde se adoptan las decisiones trascendentales que marcarán el futuro de una empresa.

Por lo tanto, la adquisición de una de las mesas de reuniones no puede ser aleatoria, sino fruto de un estudio concreto de las necesidades que vaya a cubrir esta pieza, eje central de cualquier proyecto de diseño para oficinas.

No importa tanto la forma que adopten, bien sea en u, oval, en rectángulo o redonda, siempre que contribuya a la integración de las personas, manteniendo, eso sí, un estilo coherente con el espacio donde se ubique. Esta habitación no debe tener una decoración recargada que distraiga la atención de lo que se está diciendo en torno a la mesa. Otros aspectos, aunque muy necesarios, deben quedar invisibles al usuario. Por eso, se debe exigir que el mobiliario permita de manera sencilla el acceso al canal de electrificación.

Si se precisa un espacio amplio apto para un grupo numeroso de personas, los sistemas modulares pueden ser una gran solución, ya que admiten componentes en virtud de las requisitos que haya que cumplir.

Además, no siempre una mesa de reuniones tiene que ser algo fijo. Puede diseñarse como un mueble flexible que se adapte a la actividad que en cada momento precisen los responsables de la oficina. En estos casos, conviene tener en cuenta opciones como ruedas para su transporte.

Una vez elegidos estos aspectos, el espacio ya está listo para dejar oír la voz de los expertos.