Una correcta elección de la combinación de colores para oficinas podría mejorar el rendimiento de los empleados. Elegir sabiamente contribuye a crear un bien ambiente laboral y a potenciar la sensación de confort.
Aunque elegir los muebles de la oficina y la iluminación suelen ser los factores clave en los que nos basamos, no podemos descuidar la elección de los colores.
Es uno de los colores ideales para oficina, y también para nuestro hogar. Potencia la luminosidad el entorno, y ayuda a que todo se vea más grande de lo que es en realidad.
Resulta una interesante opción en el caso de que estemos hablando de espacios reducidos y también tiene la ventaja de que resulta más fácil de combinar con los muebles.
El azul es otro de los colores que elegiremos para oficinas modernas. Podemos encontrar una amplia gama de azules que nos permite dar forma a espacios diáfanos y relajados. Combina muy bien con el blanco y se recomienda para lugares verdaderamente estresantes, así como para salas en donde los clientes/pacientes tengan que esperar mucho tiempo.
Debido a sus propiedades relajantes, el azul es uno de los colores tendencia para la oficina.
El gris también es una interesante opción; es moderno, elegante y fácil de combinar.
Los expertos en moda lo sitúan entre los mejores colores para oficina interior para empresas basadas en las nuevas tecnologías, o para salas de reunión de equipos.
El verde evoca a la naturaleza, ayudándonos a concebir lugares relajados, a crear espacios de paz en dónde no se habría creído posible. Son muchas oficinas ubicadas en los centros de la ciudad que apuestan por el verde para crear una zona que haya a los empleados pensar en la naturaleza.
Entran dentro de los colores ideales para oficina que lleva cabo algún trabajo creativo, como puede ser el caso de las agencias de publicidad.
Hay que tener mucho cuidado con el color rojo, ya que su efecto es excitante. Una sala de color rojo puede causar nerviosismo en la mente del ser humano, incluso hasta derivar en problemas de concentración.
Ahora bien, podemos reservarlo para pintar algún rincón en la oficina. Está demostrado que, siempre en su justa medida, ayuda a que el empleado tome sus decisiones de forma objetiva.
Por último, el amarillo también se encuentra entre los colores para interiores de oficina que están causando furor en los últimos años. Hay muchos tonos de amarillo, pero el color mostaza es el claro favorito de los empresarios.
Se recomienda para pintar las paredes de aquellos sitios en los que existan grandes ventanas, y es que así la luz se reflejará directamente sobre todo el entorno y parecerá más grande. Crea ambientes acogedores y cálidos, siendo algo muy recomendado para trabajar las pautas para trabajar en equipo.
Ya sabes cómo pintar una oficina para conseguir los mejores resultados.
